¿Qué piensas cuando te hablan de masa muscular? Me animaría a apostar, que pensaste en grandes músculos, definidos o un cuerpo tallado por los mismos dioses del Olimpo, algo imposible de alcanzar. Pero, ¿qué dirías si te digo que una cantidad óptima de masa muscular no necesariamente debe verse como superhéroe sacado de un cómic? ¿Y que entre mejor masa muscular desarrolles en tu juventud y adultez, mejor será tu calidad de vida cuando seas adulto o adulta mayor?
Muchas personas creen que cuando se les recomienda trabajar la masa muscular, es para que se vean grandes o “pelotudos” y hasta se piensan que en cuestión de meses se van a inflar como palomita en microondas, cuando la realidad en cuanto al crecimiento muscular es muy distinta. Sin embargo, la recomendación de hacer trabajos de fuerza es por los otros muchos beneficios que trae, no solo por la estética.
A nivel de huesos, la constante contracción muscular estimula la producción de células óseas, lo que contribuye a huesos más fuertes y menor riesgo de osteoporosis; también, ejercitar y aumentar la masa muscular aumenta tu metabolismo basal, lo que podemos traducir como, aumenta tu capacidad para quemar calorías, favoreciendo el control de la masa corporal, masa grasa y también tus niveles de azúcar en sangre.
¿Aun no te convenzo para ir a ejercitarte? Bueno, aquí te van más razones para cuidar tu masa muscular y que de una vez por todas dejes de poner tu esfuerzo en perder grasa y masa corporal. Mantener una buena cantidad y entrenamiento del músculo mejora la sensibilidad a la insulina, así que si padeces de diabetes te ayuda a controlar los niveles de azúcar en sangre y si aún no padeces, te reducirá la probabilidad de que suceda.
Cuanto más mejores y entrenes tu masa muscular, reducirás los efectos del envejecimiento a nivel hormonal, ayudándote a mantener tu fuerza y reduciendo el riesgo de padecer enfermedades crónicas, como la hipertensión o diabetes, así como la prevención en la pérdida de fuerza (sarcopenia) lo cual, será una gran herramienta para tener en tu vejez.
No es igual que llegues a 100 años, necesitando ayuda para caminar, levantarte de una silla, bañarte y hasta limpiarte, que llegar a los 100, sin dificultad para ir donde desees, levantarte o levantar objetos, bañarte y hasta pasear, porque en tus años posteriores tuviste hábitos saludables que te permitieron no solo tener cantidad de vida, sino, calidad también. Para todo eso y más, la masa muscular será tu mejor aliado si haces los esfuerzos para conservarla en tu vejez, te ayudará a tu movilidad e independencia, prevención de caídas y bienestar psicológico, al saber que puedes realizar tareas cotidianas sin esfuerzo o sin ayuda.
Así que, hoy es el día que puedes comenzar a ahorrar masa muscular para que cuando te pensiones (tu vejez) disfrutes de la vida con toda esa fortuna metabólica que fuiste creando con los años. Una buena nutrición y ejercicios enfocados en mejorar tu masa muscular, serán tus socios indispensables en el camino hacia una vida longeva y de calidad.
